My favorite 45rpm… Mocky Dimples

En esta ocasión nuestra nueva serie de comentarios va sobre esos pequeñitos pedazos de felicidad que giran a 45rpm. Esas pesadillas de color negro que perseguimos incansablemente para finalmente disfrutarlas una y otra vez en la comodidad de nuestro hogar o bien, compartirlas en esas sesiones nocturnas rodeados de amigos. Para inaugurar nuestra serie no pudimos encontrar mejor madrina que nuestra querida amiga Mocky Dimples que desde León, España comparte con nosotros su 45rpm favorito. Disfruten, amigos…

LOVE AIN'T NOTHING - JOHNNY NASH

Cuando tengo que ir a poner discos en alguna allnighter, siempre se produce un caos en casa a la hora de seleccionar 45s para meter en la maleta, pero... sé que siempre un sitio muy especial lo tiene reservado el single que he escogido, y que no es otro que "Love Ain't Nothing" de Johnny Nash.

Lo escuché por primera vez en un weekend que organizábamos en León (Maximum Mod Weekend) en el año 2000. En aquella ocasión lo pinchó Richard "Shirlee" Early, mítico organizador y Dj del club Mod más legendario de los años 80 en Londres: Sneakers.
Me impactó, sobre todo, lo indefinible de su sonido; no podría decir que es Soul, ni R&B, ni sonido jamaicano, sino una mezcla perfecta de todos ellos y aderezado, además, con la increíble voz de Mr. Johnny Nash que es emocionante, potente y acariciadora a la vez.
Johnny Nash comenzó su carrera siendo un ídolo para teenagers en los años 50, y, aunque a mediados de su carrera interpretó algunos de los temas más apreciados por los Mods, éstos, constituyeron un fracaso en su intento de volver a copar los primeros puestos en las listas de éxitos. No sería hasta finales de los 60, yéndose a vivir con su novia a Jamaica, que consiguió triunfar de nuevo interpretando un muy comercial reggae.
Ésto hace que sea difícil contar algo más sobre esta oscura grabación en su carrera. Sólo sabemos que como compositora de la canción aparece una tal Margaret Nash, ¿madre? ¿Hermana? ¿Esposa?, y que los arreglos fueron realizados por Johnny Pate, bajista de Chicago reciclado en productor para el sello discográfico Argo, subsidiario de Chess Records.

Mi primera copia fue en la label americana Argo, pero en cuanto me enteré de la existencia de una edición inglesa en Pye International, tuvo que ser mía, por afán coleccionista y por saber así que, al haber sido publicada en Inglaterra en el año 64, tuvo que ser, por fuerza, un tema totalmente del gusto de los Mods originales (no en vano aparece en la mítica lista de 100 clásicos Mods originales seleccionada por Randy Cozens).
Podría haber escogido un tema más caro, más "llenapistas" o más demandado hoy en día, pero mi tema más querido, por el que no pasan el tiempo ni las modas, y el que siempre me saca a bailar y más eleva mi corazoncito Mod es éste. Así que, cuando me escuchéis pinchando en cualquier parte, o si escucháis detrás de la puerta de mi casa, tened por seguro que en algún momento podréis disfrutar de este TEMA con mayúsculas.
Como dato gracioso, la primera frase dice “Love ain’t nothing but a monkey on your back” (¿os imagnáis un mono colgado de vuestra espalda?), pues bien, cambia la palabra Monkey por Mocky y comprenderás por qué estoy tan unida a este tema.

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Mocky Dimples
(Dimples R&B Mods, Leon, España)
Desde que escuchaba veinte veces al día el 20 Beat Classics de Georgie Fame grabado en casette a finales de los 80, hasta acabar pinchando en algunos de los más grandes weekends y clubes mods de Europa (Euro Yeyé, The Boiler, Le Beat Bespoké, Mousetrap, All Saints de Lavarone, entre otros) ha pasado mucho tiempo. Mucha ropa, mucha música, muchos amigos y muchos viajes y, sobre todo, compartir mi vida con otro Mod, hacen que me sienta parte de este culto misterioso. Estar siempre cool y hip, esa es la idea.

Extraido de:
"My favorite 45rpm..."
Underground Modzine No. 5, Jan '11

Money Money. El primer single de Steve Marriott...

The Moments – You Really Got Me / Money Money
World Artists 1032, USA

En el verano del ‘64 Steve Marriott contaba 16 añitos, para entonces ya había probado suerte en el cine, la televisión e incluso en la industria discográfica (una baladita para Decca por allá del ‘63). El chico era una joven promesa, se vislumbraba un futuro prometedor frente a él. Aquel año el joven fanático de Buddy Holy comenzó a descubrir los sonidos del R&B y el Soul americano que comenzaban a invadir Inglaterra y junto a un grupo de chicos conocidos como the Frantics y posteriormente the Moments, comenzó a probar suerte en la naciente escena R&B bajo la tutela de un tal Pete Meaden.

Seguidos de un buen grupo de jóvenes Mods se patearon los mejores clubes del momento como el mítico the Flamingo o el Crawdaddy de Richmond teloneando para figuras como John Mayall y Georgie Fame. No obstante su relativo éxito en los clubes, su escalda hacia la fama y la fortuna se vio truncada y el grupo se desbando hacia fines de año. Sin embargo, durante su fugaz trayectoria consiguieron firmar para Decca y grabar dos temas “You Really Got Me” y “Money Money”, aunque inexplicablemente fueron rechazados. Para su fortuna Alan Caddy, que por aquel entonces estrenaba su propio sello, vislumbro algo prometedor en las grabaciones y en Octubre de 1964 el disco salió a la venta bajo el auspicio de World Artists.
En una interesante apuesta por invadir el mercado americano el disco fue lanzado a la venta únicamente en Estados Unidos. Como habrá de imaginar, estimado lector, esta estrategia que pretendía obtener algo del éxito de la versión original de los Kinks no tuvo éxito y el single pasó sin pena ni gloria. Una razón más para la desbandada de los Moments que argumentaron la escasa edad de Marriott como un impedimento para alcanzar la fama.

Pocos meses después el joven Face fundaría junto a Ronnie Lane y Kenny Jones, una de las agrupaciones más emblemáticas del rock británico, The Small Faces, razón suficiente para que un grupo de inadaptados indaguemos sobre el antes y el después de tan celebre periodo. Es así como el single comienza a captar no solo la atención de los Mods, también llama atención de los coleccionistas que clasifican al single como una verdadera rareza. Me viene rápidamente a la mente el libro Empire Made de Terry Rawlings que lo presenta como un Holy Grail o la Record Collector que llego a valuarlo en £75 pronosticando un incremento exponencial con el paso del tiempo, enfatizando su carácter de rareza al remarcar que no conocían el lado B debido a que nunca habían tenido una copia en sus manos.

Para fortuna de los mortales en 2008 John Hellier publicaba en su fanzine Whapping Wharf una entrevista con Barry Hewitt, bajista de los Moments, donde hace alusión a un acetate que nunca se prenso con dos temas inéditos “Good Morning Blues” y ”You’ll Never Get Away From Me”. Ni tardos ni perezosos la gente de Acid Jazz prensó un EP con las cuatro rarezas de Marriott pre-Faces. Al mismo tiempo la aparición del EP motivaría un incremento en el precio del disco que a su vez multiplico el numero de singles a la venta ampliando así la posibilidad de hacerse con una copia, incluso, a un precio razonable.

¿Vale la pena pagar unas buenas decenas de dólares o libras esterlinas por este pedazo de plástico? Claro. Sin duda.

Dejando de lado la cara principal, una versión mediocre o mejor dicho, no muy lograda del inmortal tema de the Kinks (en mi opinión debido a una pésima producción), “Money Money” es la verdadera joya al reverso del disco. Es completamente distinta posee una producción sencilla pero es evidente que se le brindo mayor atención. Gran ritmo, un buen órgano compacto y un buen solo de armonica. La letra es original de Alan Caddy pero se puede escuchar ese “Come on children!!” que mas adelante seria sello de Marriott.
Hellier comenta en el reverso del EP de Acid Jazz que Steve suena mas como un autentico cantante negro de mediana edad que como un joven con acento cockney del East End, me parece que exagera un poco, sin embargo “Money Money” posee el sonido de esos temas emblemáticos del mejor periodo para el R&B británico, recuerda por momentos al “Country Line Special” de Cyril Davies o el “Crawling Up A Hill” de John Mayall y representa fielmente ese periodo ingenuo, elegante y cool en la estética, el estilo y la música que marcaria una generación y una época inmortal.